SOBRE NOSOTROS

Nuestra historia

Fundada en el año 2005, somos una entidad de servicios financieros localizada en el República Dominicana. Operamos bajo el concepto de “Sociedad de Capital de Trabajo”, ofreciendo soluciones financieras a la medida orientadas al capital de trabajo y creación de flujo de efectivo y liquidez inmediatos.

Atendemos empresas de diversos tamaños e industrias, aunque de nuestro modelo de negocios se benefician mayormente las PYMES y empresas jóvenes producto del emprendimiento.

Aumentamos la capacidad de negocios de nuestros clientes. Cerramos la brecha entre sus necesidades reales de financiamiento de CT y las facilidades de crédito bancarias disponibles.

Nos diferenciamos por no ser una simple empresa de factoring. Traemos soluciones adicionales para capital de trabajo, que permiten a nuestros clientes:

(i) cubrir todas sus necesidades de financiamiento cuando el factoring con las facturas de sus clientes compradores que aceptan ser cedidos no es suficiente;

(ii) obtener el flujo de efectivo necesario en momentos de crecimiento o en circunstancias de disminución considerable de flujo de efectivo;

(iii) aprovechar todo el potencial de negocios y de beneficios al recibir la capacidad financiera necesaria para explotar mercados potenciales fuera de alcance por limitaciones financieras y falta de capital.

Colaboración con Grandes Empresas

Asset Wealth Management, S. A. cuenta con un tipo de acercamiento diferente. Aunque hacemos el factoring habitual con suplidores de Grandes Empresas, también estructuramos facilidades de crédito y flujo a suplidores de Grandes Empresas que no aceptan ser notificadas ni pagarle a terceros, y damos el mismo apoyo a los suplidores, que recibirían con el factoring habitual.

Las PYMES que pasan a formar parte de la cadena de abastecimiento (supply chain) de Grandes Empresas con alta capacidad de compra, controles internos (interpretados como burocracia administrativa), y poder de negociación para exigir pagos a crédito; suelen entrar en proceso de crecimiento que les requiere de inversiones en capital de trabajo y gastos administrativos corrientes (CxC, inventarios, avances a suplidores, gastos administrativos corrientes) en comparación con el tamaño de las mismas empresas.

Esto puede significar la imposibilidad de suplir, o peor aún y en detrimento de las Grandes Empresas compradoras, el incumplimiento durante el proceso de ejecución de un contrato. Las PYMES en crecimiento considerable, en su mayoría, no suelen conseguir financiamientos bancarios y recursos formales por los valores que necesitan porque los estados financieros históricos, base principal de la evaluación bancaria, no reflejan las necesidades reales de financiamiento hasta tanto el crecimiento para, o deja de ser considerable.

Dicho esto, las PYMES insertadas en la cadena de abastecimiento de Grandes Empresas acuden al factoring, o descuento de facturas, como alternativa complementaria, más no sustituta, de las facilidades bancarias disponibles que no les son suficientes en momentos de crecimiento considerable. Cerrada la puerta del factoring por parte de una Gran Empresa compradora, y extendiendo su plazo para el pago a desde 60 hasta 150 días, queda cerrada también esta fuente de financiamiento para las PYMES suplidoras, que provoca la mala ejecución de algunos contratos, y la disminución del rango de empresas que podrían suplirle con menores márgenes, es decir, a menores precios, por tener una estructura administrativa más reducida, y por la disposición de hacer negocios que tienen.

Colaboramos con la entrada y/o la permanencia de suplidores dentro de la cadena de abastecimiento de Grandes Empresas que no podrían permanecer por falta de capacidad financiera. Estas estructuras vienen como respuesta a las necesidades del mercado, ya que son muchas las Grandes Empresas que han venido tomando la decisión de no aceptar factoring a sus suplidores por la carga operativa y contingencias legales que esas transacciones les representan.

El mismo personal de Compras de muchas Grandes Empresas, quien da la cara a los suplidores con intereses alineados, nos ha identificado como colaboradores y nos ha puesto en contacto con muchos de ellos que no les es posible suplirles valores considerables en bienes y/o servicios, a precios competitivos, bajo las especificaciones requeridas, pero para recibir su pago a plazos de entre 60 hasta 150 días.

Nuestro involucramiento podría no implicar ningún tipo contingencia, ni intervención en la relación de los suplidores con las Grandes Empresas, sin embargo, aporta los recursos necesarios para nivelar las necesidades de flujo entre el suplidor y la Gran Empresa de que se trate.

Quieres saber más?

Nos diferenciamos por no ser una simple empresa de factoring. Traemos soluciones adicionales para capital de trabajo.